El Chile.
Así como el maíz ha sido de gran importancia en el desarrollo de nuestra cultura, el chile no se ha quedado atrás, ya que ha sido su compañero inseparable durante siglos.
Los chiles son de todos tamaños y colores: chiquitos, duros y relucientes, o viejos y arrugados; gordos, alargados, rojos, verdes, morados, amarillos; pero eso sí, todos pican.
Sus múltiples clases permiten mezclarlo indiscriminadamente, dando origen a salsas, moles, encurtidos, adobos y aderezos, además de consumirse solo "chilito de amor" en verde ( de amor didas,) o bien el clásico toreado, inseparable acompañante de un buen plato de enchiladas, Flautas o de las papitas con chorizo.
Una de las maneras mas tradicionales de preparar la gran variedad de chiles con la que contamos en México, es prepararlos rellenos, y lo mejor de todo es la gran versatilidad, que nos brinda nuestro querido CHILE para poder explayar nuestra creatividad y elaborarlos en sus distintas especies.
Los chiles son de todos tamaños y colores: chiquitos, duros y relucientes, o viejos y arrugados; gordos, alargados, rojos, verdes, morados, amarillos; pero eso sí, todos pican.
Sus múltiples clases permiten mezclarlo indiscriminadamente, dando origen a salsas, moles, encurtidos, adobos y aderezos, además de consumirse solo "chilito de amor" en verde ( de amor didas,) o bien el clásico toreado, inseparable acompañante de un buen plato de enchiladas, Flautas o de las papitas con chorizo.
Una de las maneras mas tradicionales de preparar la gran variedad de chiles con la que contamos en México, es prepararlos rellenos, y lo mejor de todo es la gran versatilidad, que nos brinda nuestro querido CHILE para poder explayar nuestra creatividad y elaborarlos en sus distintas especies.
Al igual que los chiles frescos, podemos rellenar también los diferentes tipos de chiles "secos", teniendo cuidado de seleccionarlos de primera calidad, de buen tamaño, con rabo y un tanto flexibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario